Por Germán José Márquez Gil / Ingeniero de Petróleo
Durante el 23 y 24 de octubre se celebrará en Kazán, Rusia, la XVI Cumbre del BRICS, organismo internacional cuyo acrónimo corresponde a sus países fundadores: Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, pero que durante este año se anexó Egipto, Etiopía, Irán, Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos (EUA), por lo que, ahora el bloque es conocido como BRICS+. A esta importante reunión, ha sido invitada la República Bolivariana de Venezuela, considerando que el presidente Nicolás Maduro Moros, manifestó en marzo de 2023, la voluntad de que nuestro país formase parte de tan notable alianza política, económica y social.
Conforme ha sido descrito en extensos análisis de expertos y portales geopolíticos, los países originarios BRICS presentan varias semejanzas, entre ellas se destacan: grandes poblaciones (engloban el 42% de la población del planeta); territorios enormes en sus continentes (ocupan el 26,7% de la superficie terrestre). Los BRICS en el producto interno bruto (PIB) mundial, han alcanzado el 26% superando las economías del G7 (29,9%), con un incremento en la participación privada (alrededor del 20% de la inversión internacional). De acuerdo a proyecciones del Fondo Monetario Internacional, los países del BRICS representarán 33,6% de la producción mundial en 2028, en comparación con el 27% del G7. Entre 1990 y 2022, los países integrantes de los BRICS lograron una tasa de crecimiento de 4,5%, mientras que los del G-7 lograron en ese lapso una variación de 1,5%.
En cuanto a recursos energéticos se refiere, las reservas de petróleo y gas representan el 8,7% y 25,2% respectivamente, del total de recursos hidrocarburíferos cuantificados en la actualidad. Sin embargo, estos datos tendrán un aumento significativo en los BRICS+. Concentrándonos en las mencionadas energías, estas dos materias primas representan el 46% y 51% del petróleo y gas convencional disponible durante este año. Si consideramos los aportes de producción de petróleo durante el 2023, los BRICS sumaron el 24% del crudo criterio OPEP, al anexar los volúmenes producidos por los nuevos integrantes, la cifra incrementa, es decir, más del 33% de la demanda de producción de petróleo global del 2024 es aportada por los países petroleros que integran los BRICS+.
No cabe duda del aporte energético de los miembros de esta coalición multicéntrica, que, liderado por Rusia y Arabia Saudita, satisfacen una cuota considerable del petróleo demandado en la actualidad. Adicionalmente, al cuantioso aporte de producción de crudo de China y el auge petrolero en Brasil, ahora se suman los millones de barriles de los EAU e Irán, aunado al sustancial aporte de gas que los mismos países hacen para satisfacer la demanda de combustibles fósiles. Un valor energético que puede ser aún mayor, si Venezuela logra sumarse a este importante bloque pluripolar, que más allá de aumentar en alrededor de 42% las reservas de crudo y 5% las de gas, expande la presencia de Latinoamérica en un conglomerado de países euroasiáticos comprometidos en la colaboración internacional a favor de las economías emergentes.
En este sentido, cobra relevancia la expansión de los BRICS+, que vendrá en ascenso, teniendo en cuenta las numerosas solicitudes de otros países interesados en formar parte de esta alianza, cuyos indicadores demográficos, geográficos, macroeconómicos e industriales permiten resaltar la significativa importancia de este organismo. Sus objetivos se centran en la promoción de acuerdos bilaterales de comercio entre los países miembros y el financiamiento de proyectos productivos a través del Nuevo Banco de Desarrollo, creado en 2015 por los cinco países miembros.
La futura incorporación de Venezuela permitirá una ampliación intercontinental, que acerca el intercambio comercial, considerando la ubicación privilegiada que tiene el país sudamericano; condiciones que lo convierten en un aliado estratégico para la consolidación del mundo multicéntrico.
PUBLICADO: 17 de agosto de 2024