Por Reinaldo Quintero @CamaraPetrolera / Presidente de la Cámara Petrolera de Venezuela
42 años después, nuestro sector petrolero está enfrentando la situación más desafiante de toda su historia
Una historia de crecientes logros, quizás con poco reconocimiento, en el alcance y la valorización del sector privado en general y su verdadero rol en el desarrollo de la economía y en particular del sector de los hidrocarburos.
El Dr. Humberto Peñaloza, apoyado por un grupo de empresas, celebra la primera Asamblea el 24 de Mayo de 1978. El 2 de junio de 1978 se procede a registrar la Cámara Petrolera, quedando así legalmente constituida para cumplir su misión de desarrollar la participación del sector privado en el negocio de los hidrocarburos.
Desde el comienzo de nuestra historia hemos enfrentado diversas dificultades. Para la época de su fundación fue signada por el levantamiento de activos e inventarios por parte de las transnacionales, la disminución de inversiones por el cese de concesiones y la nacionalización de 16 operadoras que incluyeron tres operadoras criollas: Mito Juan, Petrolera Las Mercedes y Talon Petroleum.
42 años después, nuestro sector petrolero está enfrentando la situación más desafiante de toda su historia; y, aunque no partimos de cero, con más de 100 años de tradición petrolera, el tamaño y el alcance del desafío, sumado a la diversidad de soluciones, agrega complejidad a la situación.
Se debe revisar la normativa jurídica que permita destrabar la tarea necesaria para modernizar los servicios públicos esenciales como el agua, la electricidad, la comunicación, la distribución de combustible, y también, a su vez, apoyar los procesos transversales asociados a los bienes básicos como alimentos y medicinas.
Las ya mermadas finanzas públicas, donde cada 10$ de caída del precio del crudo implica por lo menos de un 1% a 3% en pérdida de ingreso fiscal del PIB, sumadas a un régimen de sanciones y a la emergencia sanitaria, nos colocó en la inminente necesidad de acciones que demandan la rectificación y la participación de todos los sectores nacionales, tanto públicos como privados.
Las oportunidades, soluciones y alternativas están disponibles, tenemos que avanzar hacia un gran acuerdo nacional que permita poner en marcha acelerada la rehabilitación de nuestra industria en la forma más efectiva y al menor plazo de tiempo posible.
PUBLICADO: 02 de junio de 2020